El príncipe Harry se encuentra en Düsseldorf (Alemania) para la nueva edición de los Invictus Games, los juegos para veteranos de guerra que creó en 2014. Y ahora, desde las gradas del evento, llegan las fotos (ver galería más abajo) que lo muestran acompañado de su ex asistente real, Beth Herlihy. Los dos han sido inmortalizados charlando animadamente, pero los fanáticos chismosos de la realeza no parecen tener nada a qué aferrarse: no hay ningún indicio de intriga en el horizonte. El príncipe y Beth mantienen estrecho contacto por motivos puramente profesionales.

Beth, ex bailarina y modelo, interrumpió su carrera en el mundo del espectáculo en 2016 cuando fue contratada como coordinadora de eventos para la Royal Foundation, específicamente para centrarse en Harry y Meghan Markle. Cuando los Sussex decidieron renunciar a sus deberes reales y dimitir como miembros activos de la Casa de Windsor, los miembros del personal de la corte contratados por ellos fueron despedidos. Pero en diciembre de 2020, casi un año después, Harry y Meghan decidieron volver a contratar a dos asistentes que trabajaron para ellos dentro de la institución real antes de mudarse a Estados Unidos. : Clara Loughram y Beth Herlihy. Según el Daily Mail fueron contactados para “trabajar como freelanceen los proyectos benéficos de los duques de Sussex en el Reino Unido”. No en vano, mientras tanto habían abierto juntos una empresa de consultoría, Herlou: “Conectamos a personas y organizaciones influyentes con buenas causas”, como dice su sitio web oficial, “de la intención a la acción”.

Un mensaje muy acorde con los Juegos Invictus de Harry, y que explica la presencia de Beth en Düsseldorf con el príncipe. Por cierto, voló solo a Alemania, pero su esposa Meghan Markle, que pasó los últimos días en California con los pequeños Archie y Lilibet Diana, ya está allí con él. Y permanecerá en Düsseldorf, donde entre otras cosas celebrará mañana 15 de septiembre el cumpleaños número 39 de su marido, hasta la clausura de los Invictus Games .

Artículo original publicado por Vanity Fair Italia. Accede aquí.